Misiva poco feliz... poco...

15 de mayo de 2013

Capital Federal, Bs.As.

Estimado Hombre Binario:

El motivo de esta epístola es para decirle algunas verdades que en su momento no tuve tiempo de expresar (en realidad ganas tampoco, pero de nada sirve decirlo ahora, ¿no?).

Espero que se encuentre bien en su zona de confort y con su amada, que su trabajo esté en el auge de la profesión y que su salud sea inmejorable, ojala que usted sea realmente feliz en este momento.

Le deseo esto y mucho más... Aunque usted se preguntará en este momento el porque de tanto deseo de felicidad desparramado en estas letras... Vamos! Pregunteselo que no lo oigo! Ahí está! Solo le deseo todo esto para que, lisa y llanamente, deje que mi espíritu sea libre, que olvide mi numero telefónico y decida de una vez por todas disfrutar de su vida tan maravillosa, así como yo disfruto de la mía. 

Pero no nos equivoquemos, en estas palabras no vengo a describir si mi vida es maravillosa o no, simplemente vengo a decirle que si puede, bese a su querida amada y recuerde que ella esta con usted porque lo ama (quiero creer que es así desde lo mas profundo de mi corazón, si no... cuanto lo siento!), también me encantaría que pudiera disfrutar de su trabajo y ocuparse de el como se merece, ya que le da de comer y paga sus cuentas. Ademas de esto, que sepa gozar de su tiempo libre, haciendo lo que más le guste, a mi modo de entender y según usted me ha relatado con anterioridad, tocar el bajo, leer novelas y entretenerse con tan maravilloso adelanto tecnológico que, ademas de su genero humano, nosotras, las mujeres disfrutamos tanto... la play... 

Se seguirá preguntando porque le escribo tantos buenos deseos...

Y la verdad es que esta tarde me puse a pensar en que si usted disfrutaba de su amada, aprovechaba al máximo el beneficio laboral y gozaba de su tiempo libre, no podría ocuparse de otra cosa por falta de tiempo y ganas, ya que todo esto conlleva mucha energía.

Aun así, todavía tiene tiempo para dinamitarme la cabeza con sus hermosisimos mensajes textuales, mensajes que no recibo desde hace varios meses y que estoy agradecida de no recibir, lastima que fue solo hasta esta tarde.

Le recuerdo que contestar una pregunta con otra, solo lo hace quedar como una persona sin respuestas (valga la paradoja!), también le recuerdo que la persona que realiza preguntas imbéciles tiene la misma característica de la interpelacion. Por ultimo, y así concluyo esta misiva, no es de buena educación ni de caballero preguntar si uno es feliz, no por la respuesta que uno puede dar si no por la intencionalidad y alevosía con la que usted averigua.

Saluda atentamente.

Yo, la complicada.

PD: Ya fue! Lo entendiste o lo googleamos???