martes, 26 de enero de 2016

Hoy me toca el allá

Busco palabras pero no las encuentro.
Estoy cerrando un tiempo, una etapa y ciertamente es doloroso, pero el sentimiento que mas me acosa es la incertidumbre.
Este mes pasaron muchas cosas que me tienen la cabeza revuelta y el cuerpo alerta. Estoy expectante todo el tiempo, siento que espero que explote una bomba de un momento a otro, pero tengo que desconectar.
Mañana parto hacia mi amado Sur, con ganas de conocer, de soltar, de cerrar esta etapa de la mejor manera posible.
Se que a la vuelta me esperan muchas cosas que aprender, mucho camino por empezar a recorrer y una ansiedad aniquilante.
Tengo tanta cosa mezclada que ya no se lo que siento.
Por momentos siento culpa, nostalgia, tristeza, melancolía, angustia y de ahí paso al miedo, a la ansiedad, a querer saber como, donde y que hacer. Pero de la alegría ni noticias... El disfrute no lo encuentro.
Es un duelo que abarca muchas cosas, muchas personas y muchos momento.
Hace unos días escribí rápidamente en mi teléfono, algo que venia masticando en el colectivo para no olvidarme:

"A veces uno se pregunta porque los cambios nos buscan y nos destruyen. No nos destruyen la esencia, modifican nuestro yo en el hoy. Que siempre es lo mas difícil de cambiar de forma consciente.
Es el huracán que revoluciona y de nada sirve quedarse agarrado, hay que volar y dar tantas vueltas como sea necesario. Hasta que el viento amaine y nos deje sobre la tierra, pero con la convicción de que somos más fuertes, más sabios, más tolerantes y conocedores de nuestra historia.
Hay que bancar la parada y seguir, y si no se puede más o no se quiere, parar..."

Revolución, todo mezclado, comienzo y fin, el ciclo que se completa y vuelve a empezar.
La vida es una rueda, a veces estamos allá y otras acá.
A la vuelta, el allá me va a estar esperando...

Saludos desde acá, el otro lado de la pantalla.


Yo, la complicada.