martes, 15 de abril de 2014

Sintiendo gusto a poco...

Y miro y no hay... no hay nada.
El amor no llega y la mayoría del tiempo siento que nunca llegará.
No soy "eso" que merecería un hombre enamorado, no lo soy y puta que lo quiero ser, pero ¿en serio tengo que cambiar? No importa el resto de las cosas, no me interesa, ¿para estar con alguien tengo que cambiar?
No elegí la soledad, ella me eligió a mi y en este mismísimo momento me pesa, pero me pesa en el alma.
A veces me pregunto que buscan... a veces me contesto para que preguntar.
No esta destinado, no es para mi, miro para otro lado, ya baje bandera, ya no busco mas, ya no intento, ya no quiero, ya no...
Si antes me sentía fuera de catalogo, hoy... hoy me siento fuera de mi, de la sociedad, de la gente, de la vida, me siento fuera de mi vida...
No es un rechazo más, no por la persona que no tiene relevancia, si no por el rechazo, por el maldito rechazo, por sentirme tan mierda, tan poca cosa, tan chiquitita y minúscula... en realidad al revés, tan gigante, tan bruta, tan demasiado, tan grande que no encajo en ningún lado...
Tengo tantas ganas de reirme a carcajadas de verdad, de abrazar, de besar, de sentirme amada, de divertirme, de soñar, de disfrutar...
Que me pasó? Donde fue que me perdí?
Encontrarme no significa que voy a cambiar y, llamenlo capricho, pero no quiero cambiar, no quiero cambiar para que alguien me quiera.
Quereme asi...
Saludos desde aca, el otro lado de la pantalla.
Yo